El académico de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Mayor de San Andrés nos plantea que esta conmemoración siempre constituye una fecha de mucha importancia para los trabajadores del mundo en general y para los trabajadores bolivianos en particular. Remarca que es un momento de reflexión y mucho más en el momento que estamos viviendo y que esta viviendo América Latina; de procesos de cambio, tanto en Nicaragua, Venezuela, Ecuador, Brasil y en nuestro país. Enfatiza que hay un proceso de cambio que no se puede ignorar.
Trabajador Boliviano
Respecto al significado sociohistórico de la fecha, nos manifiesta que “El primero de mayo es un momento de reflexión, de presentar demandas y eso esta bien y no va a terminar. Pero tambien debemos aprovechar esta fecha para recuperar la conciencia, recuperar la necesidad de organizarnos políticamente porque hay que cuidar este proceso, con todas las debilidades que tenga, tiene grandes fortalezas. Eso tiene que profundizarse no solo para vivir bien, sino para vivir mejor” asegura Julio Velasquez.
Continuando con el análisis nos dice: “Con tiempos históricos muy diferentes, los trabajadores del siglo vigesimo, estaban iniciandose en esto que se llama organizarse. Las primeras organizaciones sindicales, particularmente de los trabajadores mineros datan de las decadas de 1910 a 1920, que empezaron a plantear demandas a sus empresarios Patiño, Hoschild y Aramayo. Hoy estamos casi en un proceso similar, en un proceso de concientización de los trabajadores asalariados no organizados”.
En la última parte de sus comentarios, manifiesta que en ciudades como El Alto y otras, se presenta la siguiente situación: “Muchos son los trabajadores que perciben salario y no tienen una organización sindical, entonces hay que trabajar nuevamente para que adquirieran conciencia de su situación de trabajadores asalariados, de fortalecer sus organizaciones sindicales y políticas para poder avanzar”.